Las gafas son un elemento fundamental para la salida en bicicleta, ya sea en carretera o en montaña. No son un complemento que se podría considerar como estético, como es el caso del maillot. Las gafas de ciclismo son esenciales para la protección del deportista y para hacer un buen desempeño en ruta o carretera. Por eso, saber cómo elegir unas gafas de ciclismo es fundamental.
Y es que, cuando se decide emprender una ruta en bicicleta, se pretende disfrutar y sufrir lo menos posible. La pérdida de visibilidad y el deslumbramiento son dos de los riesgos más comunes del ciclismo. Las gafas ayudan a evitarlos, por tanto, están consideradas un accesorio de seguridad indispensable.
Por qué es importante elegir bien unas gafas de ciclismo
Las gafas en el ciclismo no son solo un elemento estético. Este accesorio también cuenta con las siguientes funciones:
- Protección frente a daños del sol.
- Protección ante impactos de elementos naturales.
- Aportan mejor visibilidad.
Aunque están consideradas un accesorio, las gafas pueden llegar a tener la misma importancia que el casco. Por este motivo, hay que tener en cuenta las siguientes claves para elegir correctamente unas buenas gafas de ciclismo: la seguridad, la comodidad, el peso, el tipo de lente, y por supuesto, el diseño estético.
Claves para elegir correctamente tus gafas
Para elegir correctamente unas gafas de ciclismo hay que tener presente 5 aspectos fundamentales.
El campo de visión
Las gafas de ciclismo deben aportar un campo de visión amplio, claro y nítido. Cuando el ciclista se ponga las gafas debería ver los objetos sin ninguna deformación, en caso contrario, la curvatura de la lente no sería adecuada.
La visión del ciclista debe ser completa, como si no llevase ningún accesorio sobre sus ojos. Por tanto, no puede quedar ningún punto muerto por culpa de la montura. Si el campo de visión es limitado, el ciclista tendría que mirar por los bordes de la lente, este hecho no es nada recomendable.
Durante el trayecto en bicicleta, el deportista puede llegar a alcanzar velocidades intensas. Ante este contexto, el ciclista necesita mayor campo de visión. Por tanto, se deben seleccionar lentes con montura en la parte inferior ya que este tipo de accesorio ofrece un campo de visión más recomendable.
La calidad de protección de la lente
La calidad de la protección de la lente es un punto importante a la hora de seleccionar unas gafas de ciclismo. El primer paso a la hora de elegir una lente es ver si está homologada. Debe mostrar un certificado de la Unión Europea o del país en cuestión sobre el nivel de protección contra radiaciones ultravioletas. Los estándares de calidad garantizan la protección frente al sol.
Todas las gafas de ciclismo deben indicar la categoría de filtro solar. Conocer bien que gafa se elige es fundamental para elegir la adecuada para cada caso. Existen 4 categorías:
- Categoría 0: abstraen entre el 0% y el 19% de la luz solar. Este factor permite que entre casi el 100% de la luz. Esta categoría es útil y está permitida para disciplinas como el ciclismo nocturno.
- Categoría 1: las lentes de la categoría 1 concentran entre el 20% y el 56% de la luz solar. Por tanto, llega al ojo del ciclista entre el 80% y el 43% de la luz. Se recomiendan para días moderadamente nublados.
- Categoría 2: las gafas deportivas de esta categoría absorben entre el 57% y el 81% de la luz solar. Es la categoría más utilizada para ciclismo de montaña.
- Categoría 3: adquiere entre el 82% y el 91% de la luz. Son recomendadas para situaciones de mucha luminosidad como salidas en carretera.
- Categoría 4: absorben entre el 92% y el 97% de la luz solar. Solo están indicadas para situaciones extremas de luz. No son aptas para conducir y tampoco se recomiendan para montar en bicicleta.
Más allá de las categorías, también es importante nombrar otro tipo de lentes. Las fotocromáticas se hacen más oscuras o claras en función de la luminosidad, por lo que son recomendables para ciclismo de montaña. Por otro lado, las polarizadas evitan los destellos y reflejos que puede producir el agua o la nieve. Por último, las monocromáticas son las que se podrían definir como las tradicionales.
La resistencia de las gafas
Cuando se elige una lente para practicar ciclismo es importante tener en cuenta su resistencia. Las gafas no solo deben ser resistentes ante impactos y golpes, sino también ante agentes externos como el polvo, la lluvia, las ramas, el barro, etc.
El deportista debe asegurarse de que, en caso de caída, las gafas se mantienen intactas. Si esto no sucede, el peligro en caso de accidente se multiplica.
La comodidad y el ajuste a nuestras proporciones
La comodidad y el ajuste a las proporciones individuales es esencial. La sujeción es importante para que la lente no se caiga durante el traslado. Además, el tamaño va unido a la sujeción, si la gafa no se adapta a la cara puede ser incómoda durante el trayecto.
No hay que olvidarse de las orejas y la nariz. Si la gafa molesta y hace daño, no serán recomendables para esa persona por su incomodidad.
Gafas ventilables y ligeras
Otro factor destacado es la ligereza, cuanto más ligera sea la lente menos la va a notar el ciclista. No obstante, es recomendable que en el ciclismo de montaña la gafa pese unos gramos más, de esta forma, durante los rebotes e impactos se mantendrá sujeta.
Por último, hay que tener en cuenta la ventilación. Esta características es importante para evitar empañes durante el trayecto. Por ello, es recomendable usar lentes anti vaho.
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